SAL Y SALUD

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IMPORTANCIA DE LA SAL EN LA SALUD

EL CUERPO NECESITA SAL

La sal es mucho más que un simple condimento que mejora el sabor de los alimentos; también es un aditivo que alarga su vida reteniendo el agua que contienen, evitando así que los microorganismos se multipliquen. La sal es muy importante para la salud, ya que es la mejor fuente dietética de dos elementos imprescindibles para el funcionamiento de nuestro organismo: el sodio y el cloro.

 

El sodio es el principal catión del medio extracelular. Asociado al cloro y a los bicarbonatos, tiene gran importancia en el equilibrio ácido-básico. Su misión esencial es mantener la presión osmótica en el medio extracelular y evitar así una pérdida excesiva de agua. El exceso de sodio es causa de retención de agua, mientras que su déficit provoca una pérdida de la misma. También tiene cierta importancia en el mantenimiento de la excitabilidad normal del músculo y en la permeabilidad celular.

 

El cloro es el principal anión del líquido extracelular. Su absorción y excreción, así como su función fisiológica, van muy ligadas a la del sodio. Al igual que el sodio, es muy importante para mantener la presión osmótica y el equilibrio ácido-básico. Es un componente necesario del jugo gástrico, y también está involucrado en el sistema inmunológico, pues ayuda a combatir los ataques de los gérmenes.

 

Nuestro cuerpo está formado en un 75% por agua salada, de modo que la sal es indispensable para nuestras funciones corporales: regula el contenido de líquido, mantiene la tensión de los tejidos y hace posible el funcionamiento de los músculos y los nervios.

 

La Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir unos 6 g de sal diarios. Este consumo puede depender de varios factores como el clima, la actividad, etc. El agua y los alimentos que ingerimos ya contienen sal, por lo que basta con un consumo adicional de 2-3 g al día. Si hacemos deporte, sudamos o sometemos los músculos a un gran esfuerzo, tendremos una mayor necesidad de sal.

 

Con productos a base de sal como los que te ofrece la extensa gama de productos Sal Costa, podrás proporcionar a tu cuerpo el aporte de sal diario necesario. Además, gracias a la gama de Sal Enriquecida, estarás aportando también otros nutrientes necesarios, como el yodo, el flúor, el magnesio, el ácido fólico o el calcio. ¿Te animas a probarlos?

 

LA CARENCIA DE SAL ES PERJUDICIAL PARA LA SALUD

Un consumo deficiente de sal durante un periodo prolongado puede tener efectos perjudiciales para la salud. En edades avanzadas, es especialmente importante que el aporte de sal cumpla unos mínimos, ya que como el cuerpo no puede controlar el contenido de agua como cuando era joven, necesita sal para retener el líquido. La carencia de sal conlleva que se tenga menos sal, y por consiguiente, se beba menos, lo que constituye un círculo vicioso.

 

Tampoco se justifica una restricción de sodio en la etapa de embarazo, sobretodo en personas con ileostomías (personas que experimentan una gran pérdida de sodio), terapia con litio (tratamiento prescrito para ciertos tipos de depresión), hipotiroidismo grave y algunas enfermedades renales que pueden provocar pérdidas de sodio, diarreas y vómitos abundantes.

 

2.3 AGUA MARINA Y EL PLASMA SANGUÍNEO

Fue René Quinton (s. XIX-XX) quien descubrió las virtudes del agua marina isotónica inyectada para curar diferentes patologías graves. Quinton descubrió que la composición del agua marina es muy rica en oligoelementos en zonas donde hay fitoplancton y zooplancton, de modo que se asemeja a la composición de nuestro plasma sanguíneo por su variedad y proporción de minerales y oligoelementos. También afirma que el medio vital contiene todos los elementos que contiene el agua de mar. La alimentación no decide la composición de un organismo sino que, por el contrario, es la composición primordial del organismo la que decide la necesidad y elección del alimento.

 

En 1903 la sanidad francesa reconoció el uso terapéutico del plasma marino de Quinton, y lo financió durante casi un siglo.

 

Actualmente, se comercializa agua de mar como bebida, actuando como ayudante en el tratamiento en algunas enfermedades como la fibromialgia o el síndrome de fatiga crónica. También mejora el rendimiento de deportistas, entre otras muchas aplicaciones.

 

 

LOS BENEFICIOS DE LA SAL MARINA

  • Da energía a los músculos, previene calambres musculares, agujetas, contracturas...
  • En el baño, ayuda a combatir la fatiga, el estrés y el cansancio acumulado después de una dura jornada de trabajo o de cualquier tipo de esfuerzo, haciendo que nuestro cuerpo se relaje y revitalice.
  • Elimina y/o alivia problemas en la piel como psoriasis, dermatitis atópica, dermatitis seborreica, acné, hongos, llagas labiales, picaduras de insectos.
  • Previene la aparición de varices y las venas de araña en las piernas y muslos.
  • Previene y/o alivia el reumatismo, la gota, la artritis o la artrosis.
  • Reafirma la estructura del esqueleto y le aporta dureza a los huesos. La osteoporosis aparece ante la carencia de sal, ya que si el cuerpo necesita más sal de la que se le aporta, la extrae de los huesos.
  • Tiene gran efecto bactericida y antibiótico.
  • Es muy recomendable en las personas débiles.
  • Es un antihistamínico natural, antialérgico.
  • Regula el sueño, actuando como un hipnótico natural, desarrollando patrones de sueño saludables.
  • Ayuda a eliminar infecciones recurrentes.
  • Regula el contenido de agua en el cuerpo, importante para un buen funcionamiento.
  • Es importante para generar energía en las células del cuerpo.
  • Es importante en la absorción de nutrientes a través del tracto intestinal.
  • Elimina los ácidos tóxicos (ácido úrico, ácido láctico).
  • En pocas semanas, hay una gran transmineralización y un enriquecimiento extraordinario de calcio, magnesio, flúor, etc.
  • Estimula notablemente la cura de las heridas.