En esta ocasión nos vamos hasta el sur de Polonia, más concretamente hasta la ciudad de Wieliczka, para visitar sus minas de sal conocidas popularmente como la Catedral de sal de Polonia.

Las minas de Wieliczka son unas de las más antiguas que siguen activas a día de hoy. Explotadas desde el S. XIII son un monumento y un homenaje al trabajo de todos aquellos polacos que han dedicado su vida, y siguen haciéndolo, a la minería.

Actualmente, además de seguir extrayendo sal de mesa, los turistas pueden visitar las infraestructuras de estas minas. El recorrido incluye cámaras, pasillos y capillas en las que pueden encontrar todo tipo de esculturas esculpidas en roca de sal por los propios mineros. Es tal el interés cultural y turístico por las minas de sal de Wieliczka que en 1978 fueron declaradas Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Interesante paraje, ¿verdad? Lástima que no dispongan de sal marina, pero para eso ya está Sal Costa ;)

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